11-S
Desde entonces, el momento irrepetible de los aviones chocando contra las Torres Gemelas se ha retransmitido hasta la saciedad, fijándose en la memoria colectiva, condensando los incontables efectos del ataque dirigido contra Estados Unidos por Al Qaeda.
Estos trabajos se distancian de las aterradoras y, al mismo tiempo, fascinantes imágenes y relatos difundidos en los medios de comunicación, para explorar aspectos de la experiencia, como la dimensión perceptiva y las evocaciones sensoriales y cuestiones de calado político, social y cultural. Elementos necesarios, sin duda, para la superación colectiva del trauma.
September 10, 2001. Uno nunca muere la víspera (2001), de Monika Bravo (Bogotá, 1964), y Five Minute Break (2001), de Kristin Lucas (Davenport, 1968), recogen la experiencia de artistas becadas en las Torres Gemelas en 2001 cuyos trabajos adquieren ahora un cariz premonitorio. Monika Bravo puso a grabar la cámara de vídeo la noche anterior, como venía haciendo desde hacía unos tres meses, y captó la tormenta y el rayo que impactó sobre la ciudad. Sin mostrar ni una imagen del fatídico día, la artista reflexiona sobre la fuerza destructiva del odio. Por su parte, Kristin Lucas, cuyo trabajo aborda los elementos paranormales aprovechando la idoneidad de las Torres Gemelas para el estudio de las emisiones electrónicas, creó, desde el subsuelo del edificio, un avatar al estilo de Lara Croft que intenta navegar por un submundo donde las señales no llevan a ninguna parte ni las puertas dan acceso a otros lugares.
Otras piezas, como American Dreams # 3 (2002) de Moira Tierney (Dublin, 1969) o Dust (2002) de Elena del Rivero fueron realizadas en las inmediaciones de la recién bautizada Zona Cero poco después de los ataques terroristas, mientras que los de Pia Lindman (Helsinki, 1965), World Financial Center (2002), Brian Doyle (Lakeland, 1963), The Light (2003) o Txuspo Poyo (Alasúa, 1963), Cruzando vías. Si ves algo di algo (2003), de carácter más teórico, indagan en las dimensiones antropológicas del acontecimiento y de la forma en la que ha interrogado las conductas en sociedad. Proyectadas en una sesión continua entre las 13:00 y las 19:00 de este 11-S, tres años después de la tragedia, el ciclo constituye un homenaje a las víctimas y una invitación a reflexionar sobre los acontecimientos que sacudieron el mundo en los albores del siglo XXI.
